Morfología del caballo: el tronco
El tronco, o cuerpo propiamente dicho, se apoya sobre las extremidades, sostiene el cuello y las partes externas del aparato reproductor, y forma dos cavidades, tórax y abdomen, que albergan los órganos principales de los aparatos respiratorio, circulatorio, digestivo, urinario y reproductor. La conformación del cuerpo contribuye muchísimo a la docilidad y la belleza del caballo. Tiene que estar bien desarrollado, ni demasiado gordo ni demasiado delgado, con los músculos y las venas subcutáneas bien marcadas, y el pelo ha de ser fino, brillante y suave. No debe ser muy alargado o estrecho, ni tampoco aplastado y, sobre todo, es importante que no sea flaco y descarnado, con el pelo áspero o demasiado largo.
Externamente el cuerpo comprende las siguientes regiones:
La cruz, que es la parte más elevada, situada por encima del nivel de las espaldas, entre el borde superior del cuello y el dorso. Si su altura es correcta, prominente y enjuta. conformación propia del caballo de buena raza, facilita los movimientos de las espaldas y los protege del roce de la montura. Si es demasiado carnosa, baja y redondeada dificulta la adaptación de la montura, el caballo es propenso a sufrir rozaduras y contusiones en los lados.
Si la cruz es demasiado alta y estrecha, no constituye un defecto, pero queda expuesta a sufrir lesiones graves en la parte más elevada (mal de cruz).
El dorso, sobre el cual se apoya b montura, está situado entre la cruz y el lomo y tiene como base las trece vertebras dorsales y la parte superior de las correspondientes costillas. El dorso debe ser ancho y compacto, casi sobre la misma línea de la zona lumbar, y bien recto. Si es demasiado tejo y hundido, el caballo es débil, y se dice que tiene el dorso ensillado; s es demasiado alto y arqueado se denomina dorso de cabra o camello, conformación que denota fuerza, pero hace que los movimientos del animal sean duros y rígidos.
El lomo o región lumbar se encuentra entre el dorso y la grupa, por encima de los ijares, y tiene como base las vértebras lumbares. Tiene que ser ancho, carnoso, no demasiado largo y con una ligera elevación con respecto al dorso en la parte posterior, que debe confundirse gradualmente con la grupa, de modo que estas dos regiones formen un todo continuo. Si es demasiado largo o hundido el caballo es débil, mientras que si es corto, demasiado elevado y arqueado, el animal es duro y rígido de movimientos, pero fuerte y resistente a la fatiga. La región lumbar, que es el centro de los movimientos del cuerpo, tiene que ser flexible, pero también resistente y compacta en el andar. Si los movimientos son irregulares, si la grupa es vacilante y el caballo retrocede con dificultad, puede ser que el animal sufra de la región lumbar, que tenga alguna distensión, o que padezca reúma en esta parte del cuerpo.
Grupa, que comienza al final del lomo y se extiende hasta la cola. Está limitada lateralmente por las ancas, y tiene como base ósea el sacro y la cara superior de los huesos ilíacos. Tiene que ser ancha, llena, carnosa, redondeada, un poco más elevada que la zona lumbar y casi horizontal. Si es demasiado estrecha y angulosa (grupa de mulo) afecta a la belleza y al movimiento de los posteriores; por el contrario, si es corta, inclinada y baja (grupa caída), los movimientos de los posteriores son duros y rígidos. Este defecto se encuentra a menudo en los caballos bastos, que por lo general tienen los posteriores rectos sobre los corvejones y son de proporciones cortas. En algunos casos tanto la región lumbar como la grupa pueden estar divididas en dos partes por un surco intermedio longitudinal, en cuyo caso se dice que tiene la grupa doble.
Muslos, que están delimitados por los ijares, forman las partes laterales de la grupa y tienen como base el ángulo inferior y el lado externo del hueso ilíaco. Los muslos, que transmiten los movimientos de las extremidades posteriores al tronco, y el peso del cuerpo del segundo a las primeras, no deben ser ni demasiado largos ni demasiado cortos, sino bien desarrollados y de forma redondeada. Si son estrechos el caballo es débil. Si son demasiado largos lo hacen propenso a que se alcance o se toque en las bajadas; si son demasiado cortas el comportamiento del caballo es más duro y rígido.
Cola, apéndice móvil cubierto de crines; comienza en la parte posterior de la grupa, se prolonga por detrás de los glúteos y cubre el ano y h vulva. Tiene como base los huesos coxales, sirve de adorno y para ahuyentar a los insectos.
Debe llevarse quieta, bien pegada, no tiene que ser demasiado grande, y debe lucir unas crines largas y finas. Si es demasiado baja (mal prendida) el caballo no la lleva correctamente. Ello no es un signo de debilidad, pero sí de raza poco elegante. Se llama cola de ratón cuando la falta de crines es tal que deja la piel un poco al descubierto; colino se llama al caballo al cual le ha sido amputada la punta de la cola y de las crines. Para que el animal llevara bien la cola, antaño se le practicaba una operación conocida con el nombre de operación a la inglesa, que consistía en cortar o extirpar los músculos que hacen descender la cola, y el caballo recibía coloquialmente el nombre de a la inglesa.
Ano, localizado inmediatamente debajo de la cola; es un orificio de perímetro prominente y rugoso. Ha de ser poco perceptible, liso y bastante cerrado. Si está hundido o poco terso indica falta de vigor o vejez;
Las partes del tórax son:
- Una región anterior que es el pecho, situada a continuación de la inserción del cuello, delimitada lateralmente por las puntas de los encuentros y por los brazos, y que presenta dos protuberancias musculares.
- Dos regiones laterales a izquierda y a derecha que tienen como base las costillas.
El pecho ha de ser ancho y tiene que estar situado cómodamente entre las espaldas, de modo que las extremidades anteriores no queden dema-siado próximas por su parte superior.
Un pecho demasiado prominente representa para el caballo de silla un defecto grave que lo hace lento y pe-sado de movimientos. Si el pecho es cóncavo y demasiado estrecho el caballo es generalmente débil y propenso a la rigidez de espaldas. El costado debe ser de forma redondeada, bien arqueado, y los movimientos respiratorios han de poder ser efectuados libremente. Si es demasiado alargado y muy estrecho es un indicio de falta de vigor.
Vientre, que comienza en el cartílago xifoides del esternón; las regiones laterales del epigastrio, situadas debajo de los cartílagos de las costillas se denominan hipocondrios; en el centro de la región umbilical se encuentra la cicatriz del ombligo; los lados de esta región se llaman ijares; el hipogastrio o región hipogástrica se extiende desde la umbilical hasta el borde anterior del pubis; en los lados de esta región inguinal se encuentran las ingles, que en el macho están ocupadas por el escroto y los testículos, y en la hembra por las ubres.
El vientre debe aparecer lleno, redondo y carente de tumores o prominencias. Demasiado voluminoso o caído (vientre de vaca) provoca dificultades en la acción de los pulmones, por lo que son caballos propensos a la fatiga; el vientre entrado y estrecho (vientre de galgo) indica que se trata de un caballo ardiente y fogoso, pero delicado y mal comedor.
Igualmente, los ijares tienen que ser llenos, con los movimientos de elevación y descenso regulares y poco visibles; si son bajos, cóncavos y entrados (cordiformes) indican poco vigor; muy hundidos y ahuecados denotan vacuidad del tubo digestivo o algún defecto de alimentación. Cuando los movimientos del vientre son fuertes e irregulares, si el caballo se encuentra en reposo y en estado de aparente buena salud, se puede sospechar que sea asmático o que esté a punto de serlo.
Partes externas de los genitales, que en el macho son la verga o miembro, la vaina y los testículos, y en la hembra la vulva y las ubres. Los testículos tienen que ser redondos, no demasiado grandes y de igual volumen. El caballo con ambos testículos se llama entero, y el caballo al que le han sido extirpados estos órganos mediante una operación se llama castrado. El prepucio tiene que abrirse suficientemente, y su piel tiene que ser fina y con poco pelo.
Las ubres deben ser pequeñas, de piel fina, iguales y poco desarrolladas. Si son demasiado grandes, y sobre todo si son demasiado largas y poco tersas es señal de que la yegua ya ha parido.
La vulva tiene que tener poco relieve, con la piel fina y lisa, y con los lados bastante delgados y apretados. Una vulva rugosa, ensanchada y saliente en muchos casos indica que la yegua ya ha sido madre.
El espacio que separa el ano de la vulva en la hembra, y de la vaina en el macho, se llama periné. Este último está dividido por una línea medial que sigue a lo largo de la vaina lita el prepucio. Por los lados del vientre y del tórax pasa horizontalmente y a flor de piel una gran vena torácico-abdominal).
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2 Comentarios en Morfología del caballo: el tronco
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Hola, tengo un caballo de cuatro años que tiene una deformación en la columna, una especie de joroba que le sale en la parte posterior del lomo, casi encima de las paras traseras. Esto le perjudica para correr y me gustaría saber si eso tiene cura.
¿me podrían ayudar?
Muy lindas los dibujos mostrando las ancas y de atras y de perfil.. Gracias